El lumbago o lumbalgia, es una de las patologías mas invalidantes que padece la población durante el periodo agudo de las mismas. Cuando hablamos de lumbalgia nos referimos a dolor que aparece en la zona lumbar, que puede ser irradiado o no.
Este tipo de dolor esta muy relacionado con la presencia de alguna patología musculo esquelética a nivel lumbar, ya sea causado por alguna hipertonía muscular, una disminución de la movilidad de ese tramo vertebral, debido a la aparición de alguna afectación discal (hernias, protusiones…) o bien debido alguna afectación ósea como artrosis o fracturas.
A veces, el dolor lumbar puede ser indicativo de alguna patología visceral, como infecciones de orina o alguna patología ginecológica, por lo que es importante acudir al profesional de la salud correspondiente que pueda hacer un correcto diagnostico diferencial y establecer un correcto tratamiento.
En este artículo vamos a intentar dar una serie de sencillas pautas para esos primeros días de dolor después de un gran esfuerzo, para poder así hacer el dolor mas llevadero:
1)Termoterapia: Ayudándose de una manta eléctrica, un saco de semillas o algún dispositivo similar, colóquese calor en la zona de dolor durante un máximo de 20 minutos, 3 veces al día.
2) Medicación: Como hemos dicho anteriormente, es necesario acudir al médico cuando este cuadro aparece, por lo que será primordial seguir las pautas de medicación que este nos indique.
3) Reposo: Aunque hay una falsa creencia de que el reposo mejora los cuadros agudos, se ha demostrado que en la lumbalgia, un reposo prolongado puede empeorar el cuadro e incluso favorecer que aparezca de nuevo. Solo en casos en los que el dolor sea muy fuerte esta indicado el reposo relativo, pero no mas de tres días.
4) Actividad: Es fundamental comenzar a moverse en cuanto el dolor lo permita de forma suave. Es importante evitar realizar movimientos bruscos que exacerben el dolor, así como evitar cargar peso o hacerlo adoptando malas posturas. El ejercicio suave como el Pilates o la natación, son fundamentales para la mejora del lumbago y para evitar su reaparición.