La mandíbula y la postura global.
Como explicamos en el articulo anterior, el organismo en su totalidad actúa a través del principio de compensación. Cuando aparecen alteraciones en el tercio superior del cuerpo, se producen cambios compensatorios a través de la tensión muscular que se genera en las distintas regiones de la columna, lo que fuerza a una corrección de la posición o la postura. Estos cambios adaptativos, ocurren a todos los niveles, sin que el cuerpo presente una tolerancia a ellos1,2.
Basándose en esto, se ha relacionado la articulación mandibular con múltiples alteraciones en diferentes partes del cuerpo, entre las que se incluyen la columna cervical (de la que hablamos en el artículo anterior), columna dorsal, la musculatura isquiosural, postura…resultando relevante la evaluación conjunta de estas estructuras. En este artículo vamos a centrarnos en estas relaciones y en como un tratamiento de estas zonas puede mejorar nuestro DTM*.
Recordemos que la articulación temporomandibular o ATM, es la articulación formada por la rama mandibular y un pequeño orificio que se sitúa por delante del conducto auditivo, formando una articulación la cual encaja para permitir los movimientos de apertura, cierre y traslaciones laterales que dan lugar a los movimientos básicos de la vida diaria, como son comer, hablar, toser…etc. Las molestias en esta articulación son frecuentes, ya que es una de las que presenta un mayor numero de movimientos diarios, así como traumatismos constantes.
*Enfermedad o trastorno temporomandibular
La mandíbula y la columna dorsal.
Frente al abordaje de la ATM a través de la columna dorsal, un estudio realizado por Packer en 2015 confirmó la existencia de un incremento en la actividad contráctil de la musculatura encargada de la masticación (concretamente el músculo temporal y la musculatura suprahioidea) tras una manipulación de la zona dorsal, sumada a un programa de ejercicios para dicha musculatura2.
Gracias a las manipulaciones en la zona torácica superior, obtuvieron un aumento también en la apertura máxima de la boca, mostrando diferencias significativas2,3, lo cual podría verse influenciado por el aumento de actividad muscular anteriormente observado.
A nivel de las articulaciones de la columna existen una serie de receptores que envían información a través del sistema nervioso, los cuales se encuentran situados en cápsulas articulares, ligamentos, discos intervertebrales…los cuales serán los responsables de los cambios en la actividad muscular cuando son estímulos, justificando lo anteriormente expuesto2,3.
La mandíbula y la postura
Existen estudios que afirman la existencia de una relación entre la postura corporal global y la articulación temporomandibular1,4,5. Frente a esto, Maluf estudió en 2010 el uso de la reeducación postural global (RPG) para el tratamiento de estas patologías, demostrándose una mejora en el sueño, la masticación y en la sintomatología auditiva, así como el dolor en la articulación temporomandibular, las cefaleas, además de un aumento en la actividad de la musculatura masticatoria principal4. Los resultados suponen que ambas cadenas musculares y el estiramiento asociado a la terapia manual disminuye la intensidad del dolor en la articulación, el dolor de cabeza y el raspado de los dientes1,4.
También puede abordarse aquí la idea del estudio de La Touche en 2011, que añade la influencia de la postura de la cabeza sobre la articulación temporomandibular. Estos autores apoyan la idea de que la postura de la cabeza modifica la apertura máxima de la boca y los umbrales de dolor a la presión6.
La articulación temporomandibular por todo esto se ha convertido en un centro de tratamiento importante tanto para el fisioterapeuta como para el odontólogo, ya que un tratamiento adecuado de la misma puede ser la cura o mejora de distintos cuadros.
Bibliografía
1.Saito ET, Akashi PMH, de Camargo Neves Sacco I. Global Body Posture Evaluation in Patients with Temporomandibular Joint Disorder. Clinics (Sao Paulo). 2009;64(1):35–9.
2.Packer AC, Pires PF, Dibai-Filho AV, Rodrigues-Bigaton D. Effect of upper thoracic manipulation on mouth opening and electromyographic activity of masticatory muscles in women with temporomandibular disorder: a randomized clinical trial. J Manipulative Physiol Ther. National University of Health Sciences; 2015;38(4):253–61.
3.González-Iglesias J, Cleland J a, Neto F, Hall T, Fernández-de-las-Peñas C. Mobilization with movement, thoracic spine manipulation, and dry needling for the management of temporomandibular disorder: a prospective case series. Physiother Theory Pract. 2013;29(8):586–95.
4.Samia A. Maluf, Bruno G.D Moreno, Osvaldo Crivello, Cristina M.N. Cabral, Gislaine Bortolotti APM. Global Postural Reeducation and Static Stretching Exercises in the Treatment of Myogenic Temporomandibular Disorders: A Randomized Study. J Manipulative Physiol Ther. National University of Health Sciences; 33(7):500–7.
5.Da Costa DRA, De Lima Ferreira AP, Pereira TAB, Porporatti AL, Conti PCR, Costa YM, et al. Neck disability is associated with masticatory myofascial pain and regional muscle sensitivity. Arch Oral Biol. 2015;60(5):745–52.
6.La Touche R, París-Alemany A, von Piekartz H, Mannheimer JS, Fernández-Carnero J, Rocabado M. The influence of cranio-cervical posture on maximal mouth opening and pressure pain threshold in patients with myofascial temporomandibular pain disorders. Clin J Pain. 2011;27(1):48–55.